El Ayuntamiento solicita a la Diputación medidas de ordenación en la recta de Erle a Ulma Construcción
El objetivo es lograr un acceso seguro a dos intersecciones que han registrado una alta siniestralidad en los últimos años
El Ayuntamiento ha solicitado a la Diputación Foral de Gipuzkoa la construcción de dos rotondas para la ordenación de los accesos a polígonos industriales y caseríos de la carretera GI -2630, entre el cruce del taller Erle y la entrada a Ulma Construcción.
La glorieta de Goribar facilitaría el acceso al área industrial de Obispo Otadui, el barrio de Casablanca y los caseríos Urbieta y Dolaetxe, así como organizar mejor la intersección a Torreauzo. Mientras que la rotonda de Garibai regularía con más seguridad el tráfico en el acceso al polígono industrial de Munazategi y los caseríos Argiñena, Unaingoa y Kastillokua. Ambas intersecciones son puntos negros del tráfico local en los que pese a la colocación de señalización vertical y horizontal, espejos y campañas de control de velocidad, el problema persiste, así que el consistorio considera que hay que buscar soluciones efectivas y definitivas.
«Oñati ya no puede esperar más para ordenar el tráfico de la GI-2630 entre Erle y Ulma Construcción. Los dos grupos municipales estamos de acuerdo en que es una prioridad. Hablamos de dos intersecciones que han registrado una alta siniestralidad, que soportan un tráfico muy intenso, y en las que ha habido fallecidos y heridos en los últimos años. Son circunstancias que exigen soluciones, más si cabe en este momento, por el hecho de que Ulma Packaging abrirá en breve otra planta en el polígono Urbieta, lo cual, añadirá más peligrosidad al tramo referido» explica el alcalde Mikel Biain, después de que el gobierno municipal aprobase el jueves solicitar formalmente a la Diputación Foral de Gipuzkoa la construcción de ambas rotondas para eliminar la peligrosidad en los accesos a los polígonos industriales y caseríos de Garibai y Goribar, y reducir la velocidad de los vehículos en el transitado vial que une Oñati con San Prudencio, una conexión frecuentada por 10.000 vehículos al día.
Reunión y plazos
La edil de urbanismo Irati Etxeberria, a su vez, asegura que «el Ayuntamiento realizará el esfuerzo necesario para trasladar la urgencia e importancia de tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de todos los usuarios». En este sentido, ha desvelado que el pasado día 2 se celebró una reunión en el departamento de infraestructuras viarias de la Diputación, en la que participaron, los máximos representantes del ente foral, del Grupo Ulma, LKS y del Ayuntamiento de Oñati. «En esa reunión, la delegación oñatiarra trasladamos a la Diputación la voluntad de las partes de ir de la mano para plantear una solución que sea realidad en el menor plazo posible. No es un problema nuevo, y prueba de ello es el anteproyecto que realizó LKS hace unos años» explican desde el gobierno municipal. Creen que han llegado el momento de solucionar la problemática existente en la principal arteria local, y añaden que la solución debería tener en cuenta la recuperación de la parada de autobús de SanPedro en unas condiciones de seguridad para el usuario. «En la actualidad se puede decir que la parada ha desaparecido por la peligrosidad que entraña el estacionamiento en esa zona» recuerda Etxeberria.
En la petición oficial de la reordenación, el Ayuntamiento, solicitará a la Diputación la construcción de dos rotondas en la GI-2630 en los puntos kilométricos 19 y 18,3, con un distancia 700 metros entre ambas glorietas, y la concreción de los plazos de ejecución de las mismas a la institución foral, que es la propietaria de la carretera y quien tiene la última palabra. Un punto a favor podría ser que siempre será una solución menos invasiva y mucho más barata que la de momento aparcada variante de Torreauzo, que despertó el rechazo y movilizaciones de los vecinos.
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