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domingo, 21 de enero de 2024

DONANTES DE SANGRE. HOMENAJE A NUEVE OÑATIARRAS.

 DV.

La solidaridad que corre por las venas

La asociación de donantes de sangre animó a practicar este gesto altruista en el homenaje a nueve oñatiarras por su fidelidad

Ocho de las personas reconocidas, con las distinciones recibidas. MARIAN





MARIAN GONZALEZ LIZARRALDE

Oñati.

Sábado, 20 de enero 2024, 21:52 

'Únete al latido rojo' , ese el eslogan de la asociación de donantes de sangre y con las reservas del Centro de Transfusiones de Euskadi bajo mínimos, ese fue también el viernes el mensaje lanzado en el homenaje a 9 oñatiarras por su fidelidad.

«Gracias a vuestra solidaridad y a la de todas las personas que donan su sangre miles de corazones siguen latiendo. Euskadi necesita una reserva diaria de 400 bolsas de sangre para atender la demanda de los hospitales y para contar con ellas es necesaria la labor solidaria que realizáis. Por eso aprovechamos este acto de reconocimiento a vuestro compromiso para animar a la gente a donar sangre, es un regalo de vida».


Con este mensaje de Pili Irazabal, la asociación oñatiarra graduó» en solidaridad a nueve oñatiarras que acreditan 25, 40, 50 y 60 y 80 donaciones. Cifras que dicho así, parecen poca cosa, pero teniendo en cuenta, que actualmente el baremo establece que los hombres pueden dar, un máximo de 4 veces al año, y las mujeres 3, con un intervalo mínimo de dos meses entre donaciones, estamos hablando de un compromiso continuado. Mercedes Alcalá, Jaione Anduaga y José Francisco Zabarte recibieron la insignia de plata por haber alcanzado las 25 donaciones; Lourdes García, Milagros Querejeta y Mikel Barrena la de oro (40 extracciones en caso de las mujeres y 50 en el de hombres); Agurtzane Bengoa e Isabel Yarza la de gran donante (60 donaciones); y Mertxe Sanz de Galdeano es ya donante de honor o doble oro tras llegar a las 80 donaciones.

Irazabal puso en valor la mayoritaria presencia de mujeres, pese a que pueden donar menos veces al año. Mención especial merece el caso de Mertxe que durante 26 años estuvo donando tres veces al año. «Cada vez va a ser más difícil alcanzar estas cifras, por eso eres un ejemplo en vías de extinción», escuchó al recibir el galardón especial.

El reconocimiento se llevó a cabo en la facultad de Enpresagintza de Mondragon Unibertsitatea, que además de másters, grados y licenciaturas, ofrece la oportunidad de «graduarse» en otra actividad muy importante para la vida: la solidaridad. Y es que la universidad es la sede de las extracciones de sangre que un viernes al mes organiza la asociación oñatiarra de donantes de sangre, que quiso agradecer públicamente la disposición de MU.

  • Insignia de plata- Mercedes Alcalá, Jaione Anduaga y José Francisco Zabarte (25 donaciones).

  • Insignia de oro- Lourdes García y Milagros Querejeta (40 donaciones y Mikel Barrena (50).

  • Gran donante- Agurtzane Bengoa e Isabel Yarza (60).

  • Donante de honor doble oro- Mertxe Sanz de Galdeano (80).


Ampliar la familia de donantes

El viernes por la tarde tocaba cita, y también un sencillo acto de reconocimiento para visibilizar la importancia del altruista gesto, y animar a sumarse a él. La asociación local lleva tiempo advirtiendo de la necesidad de un relevo generacional. Un mensaje que volvieron a destacar para enganchar a más gente a esta práctica que ayuda a salvar vidas.

«El año pasado sumamos 30 nuevos donantes y eso es una buena noticia, pero también se jubila mucha gente y ya no se dona con tanta frecuencia, por eso es importante, incrementar esta familia solidaria. Han cambiado las costumbres, ahora se viaja más, se hace más deporte, el reto es ser muchos más aunque se done menos».

En Oñati en la actualidad hay 525 donantes activos y en las doce citas del año pasado se produjeron 513 donaciones. Las agendas y la falta de relevo hacen que la cifra vaya disminuyendo y hay que concienciar a la gente de lo importante que es donar», señalaron.

A partir de los 18 años ya es posible y, un dato para no olvidar es que una única extracción puede salvar la vida de hasta tres personas y las transfusiones salvan una media de 75 vidas diarias. Datos contundentes, sobre todo si tenemos en cuenta que la sangre ni puede fabricarse ni puede sustituirse. Por eso en 2024 invitan a practicar más la solidaridad que corre por las venas.

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